Así, el viento se llenó de bacterias, y la tierra se pudrió hundiéndose gradualmente en la oscuridad. El joven Rey, Kayus, tiene que detener el avance de la oscuridad junto con el
Dragón de la luz, Bahamoot.
Con este comienzo, solo una palabra puede definir este juego, conversión de la recreativa de Irem corporation, en toda su grandeza: IMPRESIONANTE y la razón es bien sencilla: destila por todos y cada uno de sus poros calidad y buen hacer, impresionantes gráficos, movimiento rápido y preciso, alta adicción y enorme dificultad. En resumen, Dragon breed es un fabuloso shoot 'em' up de impresionante acabado y calidad.
El juego, como he comentado, es un Shoot'em'up de scroll horizontal. Con nuestro dragón debemos de abrirnos camino a través de seis extraordinarios niveles, usando el dragón como escudo defensivo, y también desmontando del dragón en lugares estratégicos para continuar avanzando. Tenemos que ir eliminando todos los monstruos que salen a nuestro paso. En un inicio, este disparo, es nuestra única arma pero, al eliminar algunos enemigos, estos dejan caer unas figuras que, al ser recogidas, pueden darnos nuevas habilidades y/o poderes.
La variedad de enemigos es notable y todos ellos se mueven de una manera distinta y peculiar. Debemos movernos rápido, esquivando o eliminándolos, de la faz de la tierra. Además, por si fuera poco, existen diversos enemigos finales (generalmente de grandes proporciones y/o poderes) a los que debemos destruir para pasar a la siguiente fase. Generalmente, pese a su enorme tamaño, suelen tener puntos débiles y eso es algo que debemos explotar (nos servirá para eliminar más fácilmente a los jefes de cada nivel o zona).
En fin, como veis en cuento a guión y desarrollo no se sale demasiado de los esquemas y, realmente, en eso no impresiona pero... ¿Por que motivos es Dragon breed entonces tan fabuloso? Pasemos a verlo.
Los gráficos son excelentes y coloristas. Los enemigos, como os he comentado antes, son muy variados y los hay de muchos tipos y colores (nunca mejor dicho). Los enemigos finales son impresionantes y amenazadores, sin duda una delicia para la vista. El sonido es solo para 48k y, en un inicio, parece que desmerece al producto final. En cuanto juegues más rato verás que, sin ser impresionante, es más que adecuado y correcto (a veces es mejor un sonido correcto y escueto que otro insistente e insufrible). Al principio del juego podemos definir teclas, con toda comodidad, a nuestro gusto.
El juego es increíblemente difícil. El número de vidas es a toda luces insuficiente aunque podremos ganar alguna vida. El nivel de dificultad del programa roza lo imposible y, acabar el juego sin pokes ni ayudas, se antoja a todas luces muy difícil. Tanta dificultad hace el juego muy viciante pero también, es muy posible, que frustre a los jugadores menos hábiles o más noveles. Solo por intentar llegar un poco más allá, y poder seguir disfrutando de las maravillas que nos ofrece el juego, ya da un entretenimiento enorme. El juego, de por si, es toda una delicia colorista, un Shoot'em'up rápido, muy adictivo, bastante difícil y con todo aquello que esperas, y deseas, en un juego de este tipo. Antes de este programa ya existían juegos de naves de calidad pero, sin duda, Dragon breed llega a un nivel superior y se muestra como uno de los mejores shoot'em'up jamás aparecidos para Spectrum.
Nota: 82,45%
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